El momento "Carrero Blanco" que está viviendo Irán
- Pablo Díaz Gayoso
- 1 mar
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 3 mar
En mayo de 2024 pasó uno de esos momentos históricos donde los zapatos de un régimen autoritario que parecían atados y bien atados pero de un día para otro vemos cómo saltan por los aires. El 20 de diciembre de 1973 se producía el atentado de ETA contra el Presidente del Gobierno de España Carrero Blanco. Este hecho marcó la historia del país para siempre ya que el mayor representante del ala dura continuista (denominado búnker) del régimen de Franco fue eliminado de la ecuación. Ese día a las puertas de Navidad, y a menos de dos años de morir el dictador, quedó sentenciada la dictadura. Ya no podía haber franquismo sin Franco.
El pasado domingo 19 de mayo se dieron las primeras noticias que el helicóptero donde viajaban el Presidente Raisi, el ministro de Exteriores Hossein Amirabdollahian, el Gobernador de la provincia de Azerbaiyán Oriental Malek Rahmati había tenido que realizar un aterrizaje forzoso en la región fronteriza con Azerbaiyán. La movilización de los equipos de rescate fue total e incluso se involucraron los vecinos Turquía y Azerbaiyán con medios y personal, así como la Unión Europea dió su servicio de satélites (Programa Copernicus).

Las razones iniciales que se alegan son las de las malas condiciones metereológicas que habrían provocado el siniestro. Estos motivos, unidos al hecho de que se hizo de noche complicaron y mucho las labores de rescate. Estas fueron realizadas por el personal especializado por tierra mientras se usaban drones Bayraktar turcos por aire para localizar el lugar del accidente.
Finalmente se confirmó la muerte de todos los miembros del helicóptero entre los que se encontraban dos altos mandatarios del régimen iraní. Raisi y Amirabdollahian, son dos de las figuras que cuentan con mayor legitimidad internacional dentro y fuera de Irán. Tanto es así que Raisi era el candidato más sonado como sucesor natural del Líder Supremo Khamenei. El propio Alí Khamenei fue el Presidente de la República (1981-1989) del Ayatollah Khomeini hasta que este murió y este le sucedió.
El ya fallecido Raisi no era un desconocido para el pueblo iraní ni para la comunidad internacional para cuando en 2021 el régimen lo eligió como Presidente. Su nombre salió de las fronteras del país persa por primera vez en 1988 cuando estuvo implicado como magistrado de justicia en la ejecución de miles de opositores políticos, en su mayoría de izquierdas. Miembro del ala dura de la facción Asociación de Clérigos Combatientes, su nombramiento como Presidente fue interpretado como una bunkerización del régimen ante el aumento de las protestas prodemocráticas y feministas de los últimos años.
Su muerte abre de nuevo el reloj electoral ya que según el principio 131 de la Constitución de la República Islámica de Irán: "En caso de fallecimiento del Presidente, el vicepresidente primero de la República tomará el mando (...) y deberá formar un consejo integrado por el presidente de la Asamblea Consultiva Islámica, el presidente del Poder Judicial y el vicepresidente primero de la república, que tendrá que, en un plazo no superior a 50 días, elegir al nuevo presidente de la nación". El Presidente interino en sustitución de Raisi es Mohammad Mokhber quien hasta la fecha ha ostentado cargos de importancia como miembro en el Consejo Superior de Seguridad Nacional de Irán o en el Consejo de Discernimiento.

Por esa razón las similitudes entre la muerte de Carrero Blanco y la de Ebrahim Raisi se plasman evidentes. Ambos fueron representantes del ala más conservadora de sus respectivos regímenes y ambos eran los sucesores más probables del líder. En el caso de Carrero Blanco la respuesta de Franco fue la de "no hay mal que por bien no venga", entonces se decantó por el Rey Juan Carlos como sucesor y este junto Adolfo Suárez pusieron camino hacia la democratización de España desde dentro. En el caso de Irán el proceso de sucesión está más institucionalizado. El deber de elegir un sucesor a Khamenei recae en manos de la recién electa Asamblea de Experto, una Asamblea especialmente llamativa por la desclasificación de figuras relevantes como Hassan Rouhani quien fue Presidente en el periodo 2013-2021 o Mahmoud Alavi quien fue su responsable de inteligencia.
El futuro de la República Islámica nunca fue más incierto y la continuidad de la vía bunker se tambalea. Puede ser el momento para la vía reformista o quizás rupturista. Si fue posible en la nacionalcatólica España, ¿por qué no en el Irán islámico una vez el Líder Supremo muera?
Comentários